Bolsa en caja (BIB) es un formato de embalaje común ampliamente utilizado para el envasado de alimentos y bebidas, especialmente productos líquidos como alcohol, jugos y leche. Consta de tres partes principales: una bolsa de plástico interior, una caja exterior y una pequeña boquilla de plástico. Las bolsas en cajas se utilizan ampliamente en todo el mundo porque son livianas y fáciles de almacenar y transportar. Sin embargo, el reciclaje de bag-in-boxes suele requerir un análisis más detallado.
En primer lugar, la parte exterior de cartón de un bag-in-box suele estar hecha de materiales de cartón reciclables, que pueden ser aceptados por los programas de reciclaje en muchos lugares. El cartón se puede reciclar para producir nuevos productos de papel, por lo que la parte del cartón no suele ser un problema.
Sin embargo, el revestimiento interior de un bag-in-box suele estar hecho de materiales plásticos (como polietileno de baja densidad LDPE) o de un compuesto de plástico y papel de aluminio. La reciclabilidad de este tipo de materiales es más complicada porque no son un único material, sino una combinación de múltiples materiales. Aunque algunas bolsas de plástico pueden reciclarse, no todos los sistemas de reciclaje locales pueden manejar este tipo de plástico. Las cajas en forma de bolsa con una capa de papel de aluminio son especialmente difíciles de reciclar.
Además, las cajas con forma de bolsa suelen tener una pequeña boquilla de plástico, normalmente de polietileno u otro tipo de plástico. La reciclabilidad de esta boquilla depende del tipo de plástico y de la capacidad de procesamiento de las instalaciones de reciclaje locales. En algunos casos, si la boquilla está firmemente conectada a la bolsa de plástico, es posible que sea necesario retirarla por separado para un reciclaje adecuado.
Que las cajas con forma de bolsa puedan reciclarse depende de muchos factores, especialmente si el sistema de reciclaje local puede manejar materiales compuestos y diferentes tipos de plásticos. Para aumentar las tasas de reciclaje, los consumidores deben intentar desmontar las cajas con forma de bolsa, reciclar el cartón, la bolsa de plástico y la boquilla de plástico por separado y consultar los servicios de reciclaje locales para conocer los requisitos de reciclaje específicos. Gracias a estas medidas, las cajas con forma de bolsa se pueden reciclar de manera más eficiente, reduciendo así el desperdicio de recursos y la contaminación ambiental.